Creía que era Large. Esa es mi talla cuando compro ropa. Estaba seguro y orgulloso de ello. Si alguna vez me encontraba con alguien mas alto que yo, simplemente pensaba que se salía del patrón de tamaño normal pero mi vida seguía como si nada.
Hasta que conocí a Ll. En esa época ella tenía unos veinticuatro años y yo treinta. Su figura delgada me recordó a una jugadora de volleyball que conocía. Era pecosa y eso me encanta, sobre todo en las mujeres que no son demasiado blancas. Cuando me aproximé a ella me sorprendió su estatura. Me dijo que medía uno con ochenta. Siete centímetros mas que yo.
Nunca había salido con una chica mas alta que yo. Por eso creo que nunca había notado ese mundo de gigantones que habita a mi alrededor.
Al principio me sentía un poco incómodo con su tamaño, pero su cuerpo y su cara me encantaban, así que esos pensamientos los hacía a un lado.
Hasta que sucedió. No lo puedo olvidar. La noche del viernes 22 de septiembre de 2000. Estabamos Ll. y yo en un centro comercial de la zona exlcusiva de mi ciudad. Estabamos pagando unas revistas en el supermercado que estaba practicamente sin clientes, cuando vi pasar a una pareja hacia uno de los corredores entre los estantes. Nada particular. Hasta que se me ocurrió "la brillante" idea de comprar unas nueces finas y me devolví hacia los estantes, dejando a Ll en la caja. Me dirigía rápidamente hacia el sitio donde estaban las nueces. La pareja que había visto estaba muy cerca de las benditas avellanas asi que me aproximaba raudo hacia ellos. Hasta que estuve a unos pasos. Recuerdo haber frenado abruptamente de caminar. Increíble, el tipo medía como uno con noventa y la chica era del tamaño de Ll.
No sé que me ocurrió. De pronto las sensaciones incómodas que sentía al estar con Ll, se juntaron con la sensacion de estar al lado de ésta pareja. Tuve que acercarme mucho a ellos para obtener lo que quería, y fué la sensación mas extraña que había sentido. Era una mezcla de total incomodidad y total placer. Como un masoquismo sano. La chica ni me miró, el tipo me miró y se sonrió (ggrrr!).
De pronto, el supermercado casi vacío, me hacía pensar inconscientemente, que era el mas pequeño del lugar, aunque no recuerdo si en la caja había una mujer (que tenía que ser mas bajita o si no aquella noche lo hubiera notado todo) o un tipo alto.
Desde ese momento mi vida cambió. De ser un tipo seguro, convencido de ser fuerte e inteligente, me fuí convirtiendo en un "temeroso pequeñín".
Pero estar junto a una chica mucho mas alta que yo es una sensación extraña. A veces me siento como protegido. Pero como quiero ser como ellas, las envidio también.
Un psicólogo al que fuí hace como tres años, me dijo que tenía un trauma de infancia. Que mi mamá no me había protegido lo suficiente de otro adulto que muy probablemente también era una mujer;y eso había creado una sensación de necesidad de protección no resuelta, pero a la vez de un temor a amenazas de una persona con poder sobre mi y probablemente del sexo contrario. También me dijo que tenía unas bases demasiado conservadoras, donde el hombre siempre ha sido el fuerte de la pareja y eso aumentaba mi frustración.
Y en verdad que estoy frustrado. Lo he intentado todo. Desde suplementos para crecer hasta la cirugía. Pero todo ha aumentado aún mas mi desespero. He gastado millones, sin ser rico. Y lo peor es que,siendo médico, se que es casi imposible lograr una mejor estatura. Lo único es la cirugía, pero no está a mi alcance económico. N. me dice que me ayuda con ésto, pero yo soy demasiado orgulloso.
viernes, 1 de mayo de 2009
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